Si eres de las que alguna vez soñaste con lucir unos pendientes pintados por Tintoretto, las famosas joyas de Desayuno con Diamantes o la tiara de Sissi Emperatriz, este es tu espacio igual que nuestro.
En el post de hoy queríamos contaros es que este mes hemos viajado a Florencia. Una ciudad que impresiona no importa las veces que la hayas visitado.
Uno de los motivos por los que fuimos de viaje es para buscar inspiración para nuestras nuevas colecciones. Ya sabéis que nos especializamos en la reproducción de joyas antigüas, joyas históricas de cuadros maravillosos. Y dónde mejor que Florencia para visitar museos que nos inspiren a crear nuevos modelos.
¡Te animo a que nos sigas en Instagram si no quieres perderte nada en @vintagebylopezlinares! Allí os compartimos el viaje de primera mano pero, si te lo perdiste, te dejamos un pequeño resumen por aquí.
Cattedrale di Santa Maria del Fiore. Catedral de Florencia.
La catedral florentina es uno de los edificios más grandes de la cristiandad. La fachada original, diseñada por Arnolfo di Cambio y normalmente atribuida a Giotto, fue de hecho comenzada veinte años después de la muerte de Giotto.
Símbolo de la riqueza y el poder de la capital toscana durante los siglos XIII y XIV. Destaca, de forma singular, la grandiosa cúpula, obra de Filippo Brunelleschi, una estructura isostática de 100m de altura interior. Se necesitaron 4 millones de ladrillos para su constucción.
Basílica de Santa Croche
Otro de los lugares que no os podéis perder si vais a Florencia es la Basílica de Santa Croche. Esta basílica es la iglesia franciscana más grande del mundo. Sus características más notables son sus dieciséis capillas, muchas de ellas decoradas con frescos de Giotto y sus alumnos, y tumbas y cenotafios. La leyenda dice que Santa Croche fue fundada por el mismo San Francisco.
Tuvimos la suerte de visitar Florencia cuando ya estaba todo decorado de Navidad. Os recomiendo muchísimo ir en estas fechas, por de verdad merece la pena ver la ciudad decorada tan bonita. Había luces preciosas en todas las calles, árboles de Navidad, y un ambiente muy acogedor. Además, había mercados navideños muy divertidos. Tenían comida, bebida, puestos con decoraciones navideñas… Estaba todo realmente precioso. Nosotras ya tuvimos la suerte de visitar Florencia en otra ocasión, y nos encantó conocerla vestida de Navidad.
Galleria dell’Accademia
Sin duda un museo que no puedes perderte. Aparte de que aquí podrás ver al famoso David de Miguel Angel, tiene muchas otras esculturas y pinturas realmente increíbles.
David es una obra maestra de la escultura renacentista, realizada en mármol entre 1501 y 1504 por el artista italiano Miguel Ángel. David fue originalmente comisionado como una de una serie de estatuas de profetas que se colocarían a lo largo de la línea del techo del extremo este de la catedral de Florencia, pero en cambio se colocó en una plaza pública, fuera del Palazzo Vecchio, la sede del gobierno cívico en Florencia. La estatua fue trasladada a la Galleria dell’Accademia, en 1873, y luego reemplazada en su ubicación original por una réplica.
Galleria Uffizi
Otro museo impresionante es la Galleria Uffizi. Esta foto demuesta las vistas tan increíbles que tiene la Gallería. Ademas de multitud de obras de arte. La galería ocupa por completo el primer y segundo piso del gran edificio construido entre 1560 y 1580 y diseñado por Giorgio Vasari. Es famoso en todo el mundo por sus destacadas colecciones de esculturas y pinturas antiguas (desde la Edad Media hasta la Edad Moderna). Las colecciones de pinturas del siglo XIV y del Renacimiento incluyen algunas obras maestras absolutas: Giotto, Beato Angelico, Filippo Lippi, Botticelli, Leonardo y Michelangelo.
Y además, disfrutarás de estas vistas tan espectaculares del Ponte Vecchio.
Vintage by López-Linares
No podemos negar que Florencia es una ciudad que nos apasiona. Podríamos estar horas escribiendo sobre ella. Fuimos muy poquitos días así que no pudimos disfrutar de todos los lugares tanto como nos hubiese gustado. Por eso os dejamos un resumen muy pequeño de esta ciudad majestuosa. Sin duda, estamos deseando volver. Y vosotras, ¿habéis estado en Florencia? ¡Contadnos!
La casa de subastas Christie’s ha puesto en venta una reliquia de la informática. Una de las primeras piezas diseñadas por Steve Wozniak y construido a mano en el garaje de los padres de Steve Jobs. Se trata de un Apple-1 o lo que sería el primer paso para el éxito a largo plazo de Apple en el mundo de los ordenadores personales.
Esta unidad en particular parece haber sido de las primeras 25 unidades producidas, ya que no tiene un logotipo NTI de diamante grabada en la capa de cobre y el código en el procesador 6402 es “1576”, lo que sugiere que fue fabricado en la semana 15 de 1976, es decir, a principios de abril.
Hasta el 9 de julio la casa de subastas admite pujas por la curiosa máquina, y por el momento su coste alcanza la nada desdeñable cifra de 320.000 dólares.
La subasta ha recibido el nombre de «First Bytes: Iconic Technology from the twentieth century», y ésta es una de sus piezas estrella.
Ya en mayo de este año una casa de subastas alemana remataba un ordenador de esta misma época por la cifra de 671.000 dólares.
Este pequeño ordenador tenía originariamente un precio de 666,66 dólares para la placa base sin teclado, transformador o pantalla de vídeo.
Me resulta curioso pensar que alguien haya guardado esta pieza en su garaje durante más de 35 años. Probablemente nunca soñó con revender su viejo ordenador con un beneficio tan grandioso.
Hoy volvemos con uno de nuestros famosos posts: las novias antiguas. Nos encanta leer sobre vestidos de novia antiguos. Y ver la diferencia entre cómo son los vestidos de novia de ahora. Todos nos parecen alucinantes, originales y únicos. Esta vez, no nos vamos tan lejos como otras veces. Se trata de un vestido relativamente moderno, pero que estamos seguras que os va a sorprender tanto como a nosotras.
La novia occidental y la novia oriental.
En los últimos veinte años, al igual que otros aspectos de la cultura occidental, el encanto del vestido de novia blanco de un solo uso se ha extendido por todo el mundo. En particular, las novias asiáticas han adoptado este modo: a veces usan ropa tradicional para la ceremonia y se cambian a un vestido blanco de estilo occidental para la recepción. Este elegante diseño fue creado para una novia japonesa por el artista holandés Claudy Jongstra.
Pareciendo ser un vestido blanco algo tradicional desde el frente, la vista posterior revela un fénix colorido en vuelo. El fénix es un pájaro mitológico adoptado por muchas culturas. Está genéticamente ilustrado, como aquí, con largas plumas de cola. Se creía que el pájaro vivía durante siglos. Al final de su ciclo de vida, construyó un nido reducido a cenizas del que surgió un nuevo fénix para comenzar una nueva vida. Simbolizando el renacimiento y la renovación, este dramático ciclo de vida corresponde al rito transformador de iniciación en el que participan los novios cuando se casan.
Claudy Jongstra
Formada como diseñadora de moda, Claudy Jongstra se graduó en 1989 en Hoogeschool voor de Kunsten, Utrecht, y pronto estableció su propio estudio de diseño. En 1994 se inspiró en una exposición de creación de fieltros que transformó su trabajo. Intrigada por el proceso, Jongstra perfeccionó esta técnica antigua, lo que resultó en un nuevo enfoque del concepto tradicional de tejido de fieltro. Para ella, el fieltro ofrece la emocionante posibilidad de agregar varios materiales diferentes, como la seda, el lino o el acetato, junto con la lana, produciendo tejidos sorprendentemente ligeros que conservan una calidad orgánica y terrosa.
El maravilloso vestido de novia.
Este diseño combina lana merino, seda cruda, gasa de algodón, organza de seda, cachemira cruda y lino crudo afieltrado a mano para producir una tela suave con varias texturas y brillos en toda la superficie. La imagen del ave fénix se afieltra directamente en la tela colocando fibras coloreadas naturalmente con tintes vegetales en su lugar antes de que comience el proceso. Debido a que el vestido fue hecho para una novia japonesa, el diseño incorpora un cinturón ancho que se asemeja a un obi. Las plumas de la cola del fénix serpentean alrededor de la cintura. El fieltro grueso y con muescas forma el lazo tradicional en el centro de la espalda.
El vestido es el segundo de tres piezas comparables. El primero fue producido para la novia y presentado en una exposición en el Salone del Mobile, Milán, en 2000. La pieza que se ve aquí fue encargada por Murray Moss de Moss Gallery, Nueva York y posteriormente comprada por el Museo de Arte de Cincinnati. Un tercer vestido de diseño similar se encuentra ahora en la colección del Museo Fries, Leeuwarden, Países Bajos. Cada pieza está relacionada, pero es única, ya que el proceso de “fieltrado” no es una ciencia exacta.
Hoy queremos hablaros del druzy. Se trata de un mineral que nos cautivó desde el primer momento que lo vimos. Por eso, es el protagonista de nuestro último anillo. Y queremos contaros todo sobre este mineral, para que apreciéis aún más la belleza de esta pieza.
Se conoce como druzy a la masa agregada de pequeños cristales («drusa de cristal»). Estos grupos de cristales pueden estar formados por muchos minerales diferentes. Como por ejemplo, granate, dolomita, malaquita y calcita también se encuentran en los cristales Druzy. Los colores de los minerales y las formas, tamaños y brillo de los cristales formados dependen de la composición del fluido. El tamaño del cristal variará según la función de la temperatura y la presión del fluido.
¿Cómo se forma el Druzy en la naturaleza?
Como ya hemos mencionado, el druzy son conjuntos de pequeños cristales de minerales que se forman en la superficie de otra piedra. El proceso geológico que forma un druzy, es el siguiente: El agua trae minerales a la superficie de una roca. Cuando este agua se evapora, se produce un enfriamiento y los minerales que permanecen en la propia roca comienzan a formar cristales en la parte superior. Según los minerales que hayan sido traídos por el agua, el druzy se formará de un color diferente. Existen tonalidades casi infinitas incluyendo color del arco iris, el blanco, el rosa, el azul, el morado, el verde o el negro.
El cuarzo es uno de los tipos de druzy más comunes. Independientemente del mineral que lo forme, el aspecto general suele parecerse al del azúcar. Los diminutos cristales se consideran hermosos porque, como las piedras preciosas grandes, brillan y atrapan los rayos de luz.
Los lugares donde es más común encontrar este mineral son África, Brasil, Europa, América del Sur y Estados Unidos.
Propiedades:
Como todos los minerales, el druzy cuenta con sus propias propiedades curativas. Se dice que este mineral irradia buena energía, aumenta la relajación, elimina los niveles de estrés, purifica y limpia el cuerpo. Además, amplifica otros cristales, disminuye la depresión y la ansiedad y fortalece el espíritu.
Para obtener todos los beneficios de este mineral, generalmente es una buena idea llevarlo puesto. Bien sea en un collar, anillo o pulsera. Nosotras te damos la opción de llevarlo en un precioso anillo con una tonalidad azul espectacular.
Usos:
Como os comentábamos, podemos utilizar este mineral en joyería y disfrutarlo y lucirlo a diario. Así nos aseguramos de que los poderes calmantes y curativos de este cristal permanecen cerca del calor de nuestro cuerpo.
Pero también existen piezas de druzy de un tamaño mucho más grande que nos sirven para decorar y mejorar la energía de nuestro hogar. Los practicantes de Feng Shui utilizan con bastante frecuencia este cuarzo para aportar energía y brillo a los hogares y/u oficinas. Simplemente colocando la piedra cerca de una ventana para agregar luz natural curativa.
Vintage by López-Linares
Este anillo de la nueva colección es uno de los más especiales que tenemos. Como todas nuestras piezas, está realizado a mano en plata bañada en 3 micras de oro de 24 kilates. Esta pieza es especial ya que es una pieza única. El druzy es un mineral que es prácticamente imposible encontrar dos iguales. Este anillo está realizado a partir de la propia piedra, es decir, se engastó en el propio mineral. Es por esto que es una pieza única. Ya que tienen un color, tamaño y engaste que lo hace único.
Toledo es, sin duda, el centro mundial en la producción de artesanía damasquina, y el lugar en el que aún se pueden encontrar la mayor cantidad de comercios dedicados, casi por entero, a realizar y comercializar piezas con esta técnica milenaria, el damasquino.
El Damasquino, también conocido como «el oro toledano», se basa en la incrustación de metales nobles, tales como el oro y la plata, sobre otros más comunes, como el hierro y acero pavonado. Es una técnica que se utiliza para decorar no solo joyas sino multitud de objetos de diversos usos. La técnica suele heredarse de padres a hijos, generación tras generación.
El proceso es muy lento y laborioso. Hay que dar forma a la pieza primero en hierro y posteriormente la pieza se marca con unos surcos, líneas y formas, para trazar el diseño deseado. Para después incrustar el hilo de oro o plata con un pequeño punzón.
Después, la pieza se introduce en el fuego, lo que provocará la oxidación del soporte y le dará el característico tono negro. Luego nos queda raspar, bruñir, pulir y rematar la pieza hasta que adquiera toda la belleza en las luces y las sombras de los diversos reflejos del metal.
En joyería es muy corriente encontrarlo en colgantes, pendientes, anillos y collares.
Hoy venimos a hablaros de una condesa: La Condesa de Chinchón. Y queremos hablaros de ella porque tiene mucho que ver con nuestra última reproducción de una joya histórica. Se trata de uno de los anillos que luce en el retrato pintado por Francisco de Goya en el año 1800.
¿Quién es la Condesa de Chinchón?
María Teresa de Borbón y Vallabriga, marquesa de Boadilla del Monte y 15ª condesa de Chichón, era hija del infante Luis Antonio de Borbón y de María Teresa Vallabriga y Rozas. Era prima de Carlos IV. Nació en el palacio familiar de Velada, ubicado en Toledo el 26 de noviembre de 1780. Sus primeros años de vida los pasó en el Palacio de la Mosquera, lugar donde fue retratada por Goya en dos ocasiones.
La primera fue el año 1783 y este retrato de cuerpo entero en el que luce una mantilla.
La segunda fue un retrato de toda la familia, llamado “La familia del Infante don Luis”. Este cuadro lo pintó en el año 1784.
El casamiento de Maria Teresa
Cuando muere su padre, en 1785 la separaron de su madre y la metieron en el convento de San Clemente. Doce años fueron los que pasó en este convento de Toledo, hasta que lo abandonó en 1797 para contraer matrimonio con Manuel Godoy. Este matrimonio supuso el reconocimiento de su linaje y el de sus hermanos. Hecho que les permitió volver a poder utilizar el apellido Borbón. La realidad era que Maria Teresa casi no conocía a Manuel Godoy, pero el casamiento les beneficiaba mucho a ella y a sus hermanos. Primero porque fueron aceptados en la corte con todos los honores de su rango. Y segundo, porque le permitía salir de su encierro en el convento y ser la esposa de un hombre importante.
La boda se celebró en el Monasterio del Escorial. Un lugar precioso que os recomiendo que visitéis tanto si vivís en Madrid (que lo teneis muy cerquita y podéis ir a pasar el dia). Como si sois de fuera. Merece mucho la pena conocer tanto el convento como el municipio de El Escorial.
No podemos decir que tuviera un matrimonio feliz. Ella, al poco de casarse se dio cuenta que su marido estaba enamorado de su amante Pepita Tudó. Y no solo estaba enamorado sino que acudía con ella a todos los actos, tanto públicos como privados. Y lo peor de todo, vivía con ellos en la misma casa. Como ya comprendereis esto afectó mucho a la Condesa, que odiaba cada día más a su marido.
Aun así, Maria Teresa se queda embarazada y se trasladan al Palacio de Oriente. Esto a petición de la reina que quería cuidar personalmente a la condesa y que no le faltara de nada.
El retrato de la Condesa de Chinchón
Fue estando embarazada de su hija Carlota Luisa de Godoy y Borbón – y en su tercer año de matrimonio – cuando Goya vuelve a retratarla en el que, probablemente, sea su retrato más conocido.
En el retrato podemos verla vestida con ropa de día, un vestido de crepe blanco decorado con florecitas. Lleva su pelo rizado recogido en un peinado adornado con espolones que simbolizan la fecundidad. Haciendo alusión a su futura hija. Podemos verla sentada en un sillón muy elegante con una media sonrisa en la cara.
Su mano derecha lleva un gran anillo con el retrato de un caballero —sin duda Godoy— que lleva en el pecho la banda de la Orden de Carlos III. Su mano izquierda luce un anillo más pequeño, con una piedra en el centro. Y este es el anillo que hemos querido reproducir.
Curiosidades sobre el cuadro de la Condesa de Chinchón
El cuadro fue comprado por el Museo del Prado de Madrid en el año 2000. Se le realizaron unos estudios técnicos – radiografías y análisis de pigmentos – para conocer mejor la obra y como estaba realizada. En el año 2003, Carmen Garrido, jefa del Gabinete de Documentación Técnica del Museo Nacional del Prado, hace un estudio sobre esa radiografía. En la radiografía puesta digamos “del derecho”, es decir, en vertical tal cual es el propio retrato, se podía ver perfectamente la figura de la Condesa.
Pero cuando le dieron la vuelta, poniendo a la Condesa “boca abajo”, escondía una gran sorpresa. Y es que la radiografía mostró dos obras que había pintado Goya antes de pintar el de la Condesa. Es decir, el cuadro de la Condesa está pintado encima de dos obras previas realizadas por Goya. Además, se ha podido reconocer quienes son estos dos personajes que aparecen en la pintura. Se trata de Godoy y el Marqués de Villafranca. Estos dos retratos se encuentran tapados por la falda de la Condesa.
Vintage by López-Linares
Como os comentaba antes, hemos querido reproducir uno de sus anillos. Nos encanta reproducir joyas históricas y no nos hemos podido resistir a reproducir el anillo de la Condesa de Chinchón.
Como todas nuestras piezas, está realizada a mano por maestros orfebres. Está realizado en plata de 925 bañada en oro de 24 kilates con una piedra de la luna en el centro preciosa. Las piedras de la luna tienen una tonalidad blanca maravillosa, no hay dos iguales. Os dejamos algunas fotos para que la veáis, ¿Qué os parece nuestra última joya histórica?
Hoy, día 12 de octubre, es un día de celebración en España. Se trata del día de la Hispanidad y, además, es fiesta nacional. La celebración de la Fiesta Nacional de España es el día en que el pueblo español conmemora la historia del país. Reconociendo y valorando lo logrado juntos y reafirmando el compromiso de futuro como nación. El 12 de octubre se celebra la unión y la hermandad. Mostrando también los lazos de España con la comunidad internacional.
Pero esto no es lo que os quería contar hoy. Ya que, el 12 de octubre, en concreto del año 1942, fue cuando Colón descubrió América.
Cristobal Colon
Cristóbal Colón fue un explorador y navegante italiano que completó cuatro viajes a través del Océano Atlántico. Se abrió el camino para la amplia exploración europea y colonización de las Américas. Sus expediciones, patrocinadas por los Reyes Católicos de España, fueron el primer contacto europeo con el Caribe, Centroamérica y Sudamérica.
Colón realizó cuatro viajes a América a lo largo de su vida. Pero hoy queremos centrarnos en el primer viaje. El viaje más esperado y sorprendente, por el que la mayoría de gente le catalogó de loco. Ya que fue este primer viaje en el que descubrió América un 12 de octubre de 1942.
Su primer viaje
Tras la persistente insistencia de Colón en varios reinos, fueron los monarcas castellanos, la reina Isabel I y el rey Fernando II, quienes acordaron patrocinar un viaje hacia el oeste. Además, prometieron pagar una pensión vitalicia al primer marinero que avistara tierra. Con eso, en la tarde del 3 de agosto de 1492, Colón partió de Palos de la Frontera con tres barcos. El más grande era una carraca, la Santa María. Esta carraca era propiedad de Juan de la Cosa, y fue capitaneada por el mismo bajo el mando directo de Colón. Las otras dos eran carabelas más pequeñas, la Pinta y la Niña, pilotadas por los hermanos Pinzón.
Colón navegó por primera vez a las Islas Canarias. Allí reabasteció provisiones e hizo reparaciones en los barcos. Luego partió de San Sebastián de La Gomera el 6 de septiembre para lo que, finalmente resultó ser un viaje de cinco semanas a través del océano.
12 de octubre de 1942
El 7 de octubre, la tripulación vio «inmensas bandadas de pájaros». El 11 de octubre, Colón cambió el rumbo de la flota hacia el oeste y navegó durante la noche, creyendo que pronto encontrarían tierra. Alrededor de las 02:00 de la mañana, un mirador en la Pinta, Rodrigo de Triana, avistó tierra. El capitán de la Pinta, Martín Alonso Pinzón, verificó la vista de tierra y alertó a Colón. Colón luego sostuvo que ya había visto una luz en la tierra unas horas antes, por lo que reclamó para sí mismo la pensión vitalicia prometida por Fernando e Isabel. Recordemos que esta pensión se la darían a la primera persona en ver la tierra. Colón llamó a esta isla (en lo que ahora es las Bahamas) San Salvador (que significa «Santo Salvador»).
Durante sus cinco semanas de travesía, Colón escribió un diario. La entrada de su diario el 12 de octubre de 1492 dice:
Las visitas de Cristóbal Colón
Fue Cristóbal Colón quien comenzó a llamar a los indígenas de América “los indios”. Les consideraba personas muy simples a las que podría conquistar sin ningún problema. Durante su estancia en las Américas, navegó por multitud de lugares, donde cogió prisioneros para llevarlos de vuelta a España. Exploró el noreste de Cuba y La Hispaniola (una isla del Caribe que forma parte de las Antillas), lo que hoy es Haití… También llegó a lo que hoy conocemos como República Dominicana, en aquel entonces Samana. Ahí viven los Ciguayos, los únicos nativos que ofrecieron una resistencia violenta durante este viaje.
La vuelta a España.
Volver a España no le fue nada fácil. Ya en América, la Santa María encalló el día de Navidad de 1492 y tuvo que ser abandonada. Únicamente la Pinta y la Niña pusieron rumbo a España. Colón viajó en la Niña y fue separado de la Pinta en una tormenta en mitad del Océano. Esta tormenta le obligó a parar en las Islas Azores. El gobernador de la isla no les recibió de muy buena gana, pensando que eran piratas. Después de unos días de enfrentamiento, pudieron poner rumbo a España de nuevo.
Otra tormenta obligó a Colón a parar en Lisboa. Aquí le recibió el rey Juan II de Portugal. El rey le dijo que consideraba que su viaje a América violaba el tratado de Alcáçovas de 1479. Después de unas semanas en Portugal, consiguió regresar a España, donde los monarcas le dieron una cálida bienvenida el 15 de marzo de 1493.
Otros viajes.
Colón realizaría 3 viajes más a lo largo de su vida. Esta vez mucho más grandes, ya que llegó a viajar con 17 barcos. Nosotras queríamos contaros la historia del 12 de octubre, para celebrar el día de la Hispanidad. Y así contaros otro hecho muy importante que ocurrió en este mismo día hace ya 529 años.
Hoy venimos a hablaros de algo un poco diferente. Que parece que no tiene que ver con las joyas, pero para nosotras si. Es una parte muy importante de nuestro trabajo conseguir reflejar nuestras joyas en las fotografías, para enseñaros las piezas lo mejor posible. Y, es por eso, que desde hace muchos años estoy formándome en fotografía de la mano de Carmen Hache.
Hoy queremos hablaros de ella, y de sus cursos. Gracias a sus cursos de fotografía, os aseguramos que aprenderéis muchísimo sobre el tema. Tanto si lo queréis hacer de forma profesional, como personal. A todos nos encanta hacer fotos, las hacemos a diario. Pero no siempre nos quedan como nos gustaría. Carmen Hache se encargará de que hagas las mejores fotos, y tengas los mejores recuerdos de tus viajes, familia, amigos…
Le hemos pedido a Carmen que nos hable un poco más de ella y de sus cursos, os dejamos aquí toda la información. Quién mejor que ella para contaros un poco mejor en qué consiste su nuevo curso, que comienza por cierto el 25 de octubre.
Sobre mí.
Mi nombre “fotográfico” es Carmen Hache. Estoy licenciada en Pedagogía. La enseñanza ha estado siempre muy presente en mi vida profesional. Y no he querido desvincularla de mi otra gran pasión que es la fotografía. Comencé en este mundo de mano de la fotografía analógica. Desde muy pequeña siempre he ido con una cámara guardando recuerdos de todo lo que sucedía y, poco a poco, creando pequeñas historias con mis fotos.
Me he formado en Diseño y moda, escritura creativa, educadora de adultos, cursos de fotografía de retrato, dirección de modelos, fotografía nocturna, edición en Lightroom y en Photoshop.
Desde que decidí dejar mi vida laboral en oficinas y apostar por la fotografía como modo de vida he impartido más de 200 cursos, entre talleres presenciales de retrato, tanto individuales como grupales, workshops, cursos personalizados One to One, cursos de edición presencial o los individuales online. Y es aquí donde más cómoda me encuentro, enseñando, compartiendo mi experiencia y mi forma de vivir la fotografía. Mi primer curso online, Encuentra tu estilo fotográfico, cuenta ya con siete ediciones. Y de ahí, de la experiencia con este curso nace este segundo, aunque no es continuación, los entiendo como cursos independientes.
Me encuentro en un momento de calma, que es desde donde creo que más puedo aportar. La calma, la seguridad y la experiencia.
Descripción del curso.
Después de ocho años impartiendo formación, tanto presencial como online, una de las frases que más he escuchado por parte de mis alumn@s es “yo no tengo ideas nuevas”, “yo no soy creativ@“, “no sé de dónde sacar las ideas para mis fotos”…
Pues sí, tú también eres creativ@.
Este curso nace con la idea de ser una provocación constante, nace para crear en ti las ganas de investigar, observar, aprender y poner todo en práctica. Partiendo de una información general, en cada lección propongo dos retos creativos. Sencillos y con resultados que te harán encontrar nuevas zonas de confort. En este curso vas a leer, escribir, hacer fotos, investigar, recortar … tómatelo como un juego que te saque de la rutina diaria, tan poco inspiradora en muchos casos. Este curso busca que no no quieras dejar de hacer fotos y que tu cabeza se llene de nuevas ideas. Algunas que jamás te habías planteado. Porque la creatividad se puede educar.
¿Cómo es el curso?
Es un curso online con acompañamiento.
Cada lunes, desde el día de comienzo y durante cuatro semanas, tendrás acceso a una nueva lección del curso. Cada lección contiene dos retos / puertas.
Feedback por mi parte durante la duración del curso.
Ejercicios y propuestas prácticas para hacer de modo individual con mi supervisión.
Foro privado para comentar y compartir.
Mucha información práctica y ejemplos visuales.
Sin horarios fijos. Lo haces a tu ritmo.
Terminarás el curso con una gran cantidad de ideas para no “quedarte en blanco”.
Acceso ilimitado a todo el contenido una vez completado el curso.
Vintage by Lopez-Linares
Tuvimos la suerte de formar parte de la sesión de fotos con la que presenta su nuevo curso “La llave de Alicia”. En ella utilizo alguna de nuestras joyas y piezas antiguas, y como podéis ver, ¡quedó una sesión preciosa!
Además, nos ha dado un código de descuento por si queréis hacer este curso, en el que os ahorráis 5 euros. Solo tenéis que utilizar el código MARIA5. Os dejamos el link a su web aquí.
Encontrar la inspiración… siempre es una incógnita dónde y cuándo aparecerá. Nosotras somos observadoras por naturaleza y siempre tenemos la mente abierta a cualquier detalle que nos pueda inspirar para crear una nueva joya. Hoy queremos hablaros del Tesoro de Guarrazar.
Esta vez hemos viajado bastante lejos en el tiempo. Nos tenemos que remontar al año 711. Fue en esas fechas cuando las tropas musulmanas y bereberes de Tariq Ibn Ziyad atravesaron la península ibérica aplastando en su camino a las tropas de Don Rodrigo. Se encontraron con un camino casi libre para conquistar sin problema Toledo, capital del reino Visigodo en aquel momento. Este es el viaje en el que queremos que nos acompañéis.
Fue a consecuencia de esta conquista que los visigodos decidieron esconder uno de los más increíbles y preciosos tesoros de la época.
¿Quién y cómo se descubrió el Tesoro de Guarrazar?
Tenemos que situarnos a mediados del S. XIX. Por más de 1.100 años permanecieron estas maravillosas joyas ocultas. Pero la casualidad quiso que vieran la luz de la manera más insospechada.
Cuenta el anecdotario popular que una joven llamada Escolástica. – Aquí me he parado a pensar si la joven habría nacido el mismo día que yo, ya que yo llevo este nombre también por haber nacido el 10 de febrero. Eso sí, algunos años más tarde -.
Se dice que Escolástica regresaba de un agradable paseo veraniego con su madre, María Perez, y su padrastro, Francisco Morales. Corría el año 1848 y ese 24 de agosto el calor seguro que sería sofocante, como suele ocurrir en esta época en esa zona de España. El paseo los llevó hasta las afueras de un pequeño pueblo cercano a Toledo, llamado Guadamur. No os olvidéis de este nombre porque merece la pena viajar hasta sus tierras para conocer de cerca todos los parajes que acompañan esta peculiar historia.
Parece que una necesidad fisiológica asaltó a la joven y decidió ocultarse tras unas piedras. Ya era tarde y estaba oscuro, pero a Escolástica le sorprendió el destello dorado de un objeto. Justo a su lado y debajo de una gran losa de piedra, Escolástica se encontraba sin saberlo, sobre una de las tumbas de un antiguo cementerio. Parece ser que los días anteriores había caído una terrible tormenta de verano que había movido toda la tierra. Y por suerte, como consecuencia, había dejado al descubierto parte de las lápidas.
Cegada por la curiosidad, avisó a sus padres, los tres corrieron ansiosos a desenterrar aquel objeto. Ese día, por casualidad, acababan de descubrir una auténtica joya arqueológica visigoda: el Tesoro conocido con el nombre de Guarrazar. Se le dio este nombre por la finca sobre la que se sitúa. ¿Os imagináis la cara que se les quedaría a los tres?
¿Qué hicieron al encontrar el Tesoro de Guarrazar?
Decidieron lavarlo todo en un riachuelo cercano, cargarlo en su mula y llevárselo a casa. Pero lo que no sabían es que en ese momento otro vecino estaba dando buena cuenta de sus actos. Un hortelano de nombre Domingo de la Cruz, quien se acercó al sitio cuando la familia se marchó. Así es como se topó con otra tumba que también contenía parte del preciado tesoro. Domingo desenterró la otra parte y se la llevó a su casa.
Entre las dos familias, y en apenas unas horas, habían desenterrado uno de los tesoros más importante de la historia antigua de la península ibérica.
¿Qué pasó después?
La parte del tesoro que encontró la familia Morales-Pérez terminó siendo vendida a través de un intermediario experto en diamantes al Estado francés. Concretamente al Museo de Cluny. Aún hoy puede verse parte de él en este museo. Y casi fue una suerte que esto pasara, porque gracias a ello, esta parte del tesoro se conserva íntegramente.
El Gobierno español, en medio de un fortísimo escándalo que llegó a las Cortes, intentó recuperarlo sin éxito. En ese momento, Napoleón III esgrimía las más peregrinas excusas para no devolverlo.
Finalmente, en 1941, con una Francia ocupada, el lugarteniente de Adolf Hitler y el nazi Heinrich Himmler, devolvieron al Gobierno español buena parte del hallazgo. Además de piezas arqueológicas de la importancia de la Dama de Elche.
No corrió tanta suerte la parte del tesoro que encontró el hortelano Domingo. El lo que hizo fue mantener las piezas ocultas durante unos años. Solo sacándolas a la luz para vender una parte a varios joyeros toledanos. Estos lo que hicieron fue desmontarlas y fundirlas para hacerlas desaparecer de las autoridades y de la policía. Y con el oro y las piedras realizaron otras joyas. Consiguiendo así que se perdiera por completo su rastro. Me duele el alma solo de pensar la escabechina que cometieron estos artesanos con esta parte del tesoro.
En 1861, agobiado por la presión, Domingo entregaría a Isabel II lo poco que le quedaba del tesoro. Entre otras cosas la valiosa corona del rey Suintila que, lamentablemente desaparecería del Palacio Real en 1921, sin que hayamos vuelto a saber nada mas de ella.
¿Dónde está la corona de Suintila, el rey visigodo que expulsó a los bizantinos de la Península?
Ese es otro de los misterios aún sin resolver. Pero la historia de este tesoro es mucho más apasionante de lo que en un principio podría parecer. Y esto fue gracias al empeño de Juan Manuel Rojas, un apasionado arqueólogo que se ha dejado la piel en este yacimiento. Y también gracias al ayuntamiento de Guadamur hoy sabemos que la zona no era una simple huerta donde los visigodos enterraron sus tesoros más preciados.
Guarrazar esconde el yacimiento de uno de los lugares de culto más importante de la era visigoda. Un complejo religioso semejante al Santuario de Lourdes en Francia.
En los últimos años han aflorado los muros de un edificio de más de 30 metros de longitud, una iglesia basilical, los restos de un posible palacio, un cementerio visigodo y hasta una edificación que servía de residencia a los peregrinos. También sabemos ahora que había una fuente de aguas curativas. El mismo lugar donde la familia Morales limpio las joyas era el lugar donde los cristianos iban a pedir a Dios su sanación.
Es por esto, y dada su importancia, por lo que el tesoro real se guardaba allí. En los edificios religiosos y reales, de cuyos techos colgaban las coronas votivas de los monarcas y lo que realmente sucedió fue que, ante el avance imparable de los musulmanes, aterrados, los responsables del tesoro buscaron un lugar donde enterrar las joyas. Se les ocurrió que lo mejor era meterlas en el cementerio. Allí nadie miraría. Levantaron dos lápidas, escondieron los preciados objetos, los taparon con piezas de tela y arena y volvieron a poner los cadáveres encima.
El tesoro de Guarrazar.
El tesoro está compuesto por diez coronas votivas —entre las que sobresale la del rey Recesvinto (649-672)— cruces de oro, piedras preciosas, perlas, esmaltes, nácares y cristal tallado. Todo fabricado en el siglo VII.
Hoy, el tesoro se distribuye entre los fondos del Museo Arqueológico Nacional, Museo de Cluny de París y el Museo de la Armería del Palacio Real de Madrid. También hay una copia de las coronas en el Museo de Toledo. Este conjunto constituye el tesoro de orfebrería visigoda más importante de todos los conservados. Y el mejor ejemplo de la actividad de los talleres oficiales de la corte toledana.
Otra anécdota super curiosa es que desde el año 2014 gracias a la alcaldesa de Guadamur, Sagrario Gutiérrez, el lugar es un yacimiento arqueológico visitable, casi único en España. Pues resulta que ella encontraría en una de sus innumerables visitas al yacimiento, un magnífico zafiro semi enterrado en el barro. Este podría ser uno de los zafiros que se desprendió de una corona cuando la familia Morales lavó el tesoro en el riachuelo. Y que quedó allí enterrado hasta que otra casualidad quiso que saliera a la luz de manos de la Alcaldesa.
Vintage by Lopez-Linares.
Nosotras nos quedamos enamoradas de algunas de las piezas que decoran estas coronas. En nuestro afán por ofreceros piezas diferentes, exclusivas y únicas, decidimos lanzar una serie de pendientes y sortijas con el cierre inspirado en estas piezas. El diseño es muy sencillo y está basado en la joyería visigoda de esos años.
Cada pendiente es único. No habrá dos iguales. Para darle así más exclusividad a la colección. Hemos preparado una serie combinando distintas piedras semipreciosas, coral, perlas, madreperla y elementos que podrían haber sido usados por los visigodos. Y los hemos montado con las mismas técnicas que ellos usaron.
Nuestra colección de pendientes del Tesoro de Guarrazar
Os voy a explicar un poquito el proceso creativo para que veáis de donde han salido cada uno de los elementos.
La idea surgió después de una visita guiada al yacimiento Guadamur. Como os decía antes es un pequeño pueblo a escasos 10 minutos en coche de Toledo. Un pueblo curioso que esconde varias sorpresas aparte de este magnífico lugar.
Nosotras tuvimos la suerte de realizar la visita de la mano de Juan Manuel Rojas, el arqueólogo padre de todo este enorme descubrimiento. Realizan visitas guiadas que son una forma de ayudarles a continuar con esta apasionante investigación.
Bueno, la cuestión es que nos enamoramos de la historia y del tesoro. Y de vuelta a Madrid nos pusimos manos a la obra para buscar material gráfico de las coronas. Después de algún que otro diseño y modificación nos quedamos con estas tres piezas.
Y os cuento que la que tiene forma de tulipán está inspirada en una piedra tallada perteneciente a la Iglesia donde estaba el tesoro. Y las otras dos son concretamente de la corona de rey Suintila: la que desapareció en 1912 y no se ha vuelto a saber nada de ella. Nos pareció que era un bonita forma de hacer honor a esa magnífica pieza desaparecida tan misteriosamente. Y así, conservar parte de su belleza en la actualidad.
Esperamos que os hayan gustado las joyas y la historia tan curiosa de este Tesoro de Guarrazar.
El larimar es una variedad única de pectolita, que es una piedra con una formación fibrosa inusual, bastante dificil de encontrar. De hecho, la variedad de larimar azul brillante solo puede encontrarse en la República Dominicana, en el Caribe. Esta piedra fue descubierta en el año 1916, y no recibió el nombre por el que hoy le conocemos hasta 1974.
¿Como se forma es el larimar?
El larimar esta compuesto mayormente por pectolita y un silicato ácido hidratado de calcio y sodio. Se forma en cavidades dentro de la lava creada por erupciones volcánicas. Estas rocas volcánicas contenían cavidades que se llenaban de minerales, entre los cuales estaba la pectolita azul. Cuando estas rocas se erosionan, los rellenos de pectolita son arrastrados por la pendiente para terminar en el aluvión y las gravas de la playa. A través del río la pectolita llegó al mar. Y de tantas vueltas que daba en su recorrido se iba puliendo hasta conseguir el pulido natural que tiene la piedra.
La calidad del larimar depende del color del mismo. Cuanto más azul y brillante, más caras y exclusivas son las piedras.
Propiedades del Larimar.
La piedra de larimar se descubrió hace relativamente poco tiempo – si lo comparamos con otras muchas piedras y cristales preciosos- por lo que sus propiedades no están tan claras. La «personalidad» completa de una piedra preciosa lleva bastante tiempo hasta ser entendida completamente. Y cualquier experiencia con ella es muy valorada en esta etapa.
Se dice que esta piedra ayuda a la calma y la serenidad. También está muy conectada con el elemento del agua – que es el elemento que gobierna nuestras emociones -. Por ello, al larimar se le considera una piedra perfecta para ayudar a calmar la ansiedad y los problemas emocionales.
Está conectado con el chakra de la garganta, que es el chakra de la comunicación (y generalmente se caracteriza por un color azul brillante o turquesa). Se utiliza mucho en la meditación, ya que se cree que ayuda a la comunicación. No solo con nosotros mismos, sino con los demás y con el universo.
Vintage by López-Linares
A nosotras nos encanta esta piedra. Por ello, decidimos sacar una pieza con una piedra de larimar bastante grande, para que sea la absoluta protagonista del anillo. Esta realizado a mano en plata. Queremos sacar más piezas de este tipo en los próximos meses, ¡os mantendremos informados de todas las novedades!
Hoy queremos hablaros de Las Joyas de la Wallis Simpson. Es difícil comparar la colección de joyas de la duquesa de Windsor con cualquier otra. La venta final de la colección fue única: no sólo eran éstas las joyas que habían sido elegidas por un rey para dárselas a la mujer que amaba y por la que abandonó un trono, sino que también incluían, por derecho propio, algunos de los ejemplos más importantes del arte y la creatividad de los más prestigiosos joyeros del siglo XX.
Durante todo el noviazgo del Príncipe de Gales con Wallis Warfield Simpson, y también durante su vida de casados, compartieron una pasión por la joyería. Encargando una serie de fabulosas creaciones a algunos de los mejores joyeros de la época. Antes de su muerte en 1986, la duquesa de Windsor dejó instrucciones de que su colección de joyería debería venderse tras su muerte. Y todas las ganancias donadas al Instituto Pasteur en París, como muestra de gratitud a los franceses por toda la amabilidad que habían mostrado a ella y a su marido.
Muchas de las piezas que el Príncipe de Gales encargó para Wallis estaban basadas en sus propias ideas, pasando muchas horas con los joyeros que las crearon.
La subasta tuvo lugar en Ginebra en abril de 1987.
Casi todas las joyas estaban dedicadas con pequeñas inscripciones o fechas. La primera inscripción fechada se encontró en un collar de doce dijes, que llevaba en el reverso de una placa las fechas “9/4/34 12 de marzo 1934 15/5/34”. No ha sido posible encajar estas fechas con ocasiones en particular, pero los otros dijes del collar rememoran fines de semana en Fort Belvedere, en Windsor, vacaciones a menudo con la Tía Bessie y otros amigos, y eventos mencionados en cartas y diarios. El collar era una pieza simple y muy personal, y aunque la estimación de venta fue de 2000/3000 francos suizos, la joya se remató en 198.000 francos suizos, quedó claro que los compradores estaban dispuestos a pagar un alto precio por lo que ellos consideraban un trozo de historia.
Las siguientes fechas significativas se encuentran en un colgante de una cruz latina en oro que Wallis dio al príncipe también en 1934, y en una cruz latina en platino, similar, que el príncipe dio a Wallis, venía la fecha y la inscripción: «WE are too 25.XI.34”
En 1935 Cartier montaría una pulsera de diamantes con estas cruces más otras 7, hasta completar una pulsera con 9 cruces. Cada una tenía interesantes y a veces divertidas inscripciones.
Había una que conmemoraba su operación de apendicitis en 1944; otra, con la inscripción «God save de King for Wallis 16.VII.36», era un recuerdo del día en que un periodista irlandés intentó disparar al rey. Había también una cruz con una dedicatoria por la boda; se puede ver a Wallis llevándola en los retratos de boda hechos por Cecil Beaton. De nuevo era una joya de gran significado personal, así como de un enorme atractivo.
Las Joyas de la Wallis Simpson
Los regalos continuaron durante el noviazgo con una impresionante pulsera de esmeraldas y diamantes, que Edward le regaló por Navidad en 1935. Ella, en respuesta, le regalaría una pitillera de oro de Cartier, que llevaba un mapa grabado con varios recorridos que ellos habían realizado.
Otra de las piezas más sorprendentes era una impresionante pulsera de rubíes y diamantes de Van Cleef & Arpels, creada por uno de los mejores diseñadores de París, René-Sim Lacaze; un diseño sencillo pero extremadamente elegante, engastado con vivos rubíes birmanos. En el broche llevaba inscrito «Hold Tight (Abraza fuerte) 27.III.36».
En su 40 cumpleaños, el 19 de junio de 1936, recibió un espléndido collar de diamantes y rubíes birmanos de Van Cleef & Arpels. Este original diseño se puede ver en fotografías contemporáneas de la duquesa y en los archivos de la firma, pero cuando llegó a la subasta había cambiado su estilo totalmente. El diseño original del collar quedó pronto obsoleto, y en 1939 se encargó a Lacaza rediseñar la joya. La creación que produjo era espectacular: los rubíes y los diamantes estaban montados como un collar entrelac-de-ruban(un tipo de entrelazado que se usa en tapicería), que sostiene una borla desmontable, se añadieron algunas piedras y el resultado fue una obra maestra del arte de la joyería. Wallis lo llevaba con un par de pendientes a juego de 1936 a los que también había actualizado su diseño; de hecho, cuando aparecieron en la subasta, se habían vuelto a alterar.
Su compromiso.
La fecha de compromiso el 27 de octubre el rey dio a su futura esposa un exquisito anillo para celebrar la ocasión. Se compró a Cartier una excepcional esmeralda colombiana de 19,77 quilates, y se montó en un vástago de platino liso con la inscripción: «We are ours now 27.IX.36», una declaración sencilla, pero audaz. Según una entrada en el diario de Marie Belloc Lowndes, Cartier adquirió la esmeralda en Bagdag, pero originalmente era el doble de grande. Cartier decidió que el mercado era muy limitado para una gema de ese tamaño y la cortó por la mitad. Una la compró un millonario americano y la otra el rey.
En diciembre de ese mismo año, y ya con su abdicación consumada, Edward, desde Austria, le envió a Wallis otra joya de Lacaze en forma de un clip de rubíes y diamantes
Hubo muchos otros regalos sentimentales durante estos meses de forzada separación, culminándose en la magnífica pulsera de zafiros y diamantes de Van Cleef & Arpels, que Lacaze diseñó para celebrar la finalización de su contrato matrimonial según la Ley francesa del 18 de mayo de 1937. La boda tuvo lugar el 3 de junio en el Château de Candé en Francia.
Al año siguiente el duque de Windsor regalaba a su esposa una espectacular pulsera de Cartier con la inscripción: «For our first anniversay of June third». Los dos grandes extremos llevaban engastados rubíes de Birmania
Durante toda su vida de casados, la pareja continuó amasando una colección extremadamente interesante de joyas.
En 1946 los Windsor volvieron a Inglaterra a una visita privada, y estando con Lord Dudley en Edman Lodge en Berkshire un ladrón robó todas las joyas que Wallis llevó. Siempre ha habido cierta controversia sobre la magnitud de la pérdida, pero a todas luces fue pequeña porque el grueso de su colección se quedó en Francia
La colección de Las Joyas de la Wallis Simpson
Los Windsor adquirieron su primer clip de panteras en 1948. Era una piezas de oro decorada con esmalte negro y con una gran esmeralda en cabujón en bajorrelieve. Que fue la primera joya en gato, totalmente en tres dimensiones, de Cartier.
Durante cerca de dos décadas los Windsor continuaron adquiriendo estos magníficos gatos. En muchas de estas joyas, no sólo el cuerpo del felino era flexible. Sino que su cuello estaba montado de tal manera que el ángulo de la cabeza se podía alterar a gusto. En 1956 adquirieron una pulsera de ónice y caprichosos diamantes amarillos en forma de tigre, y su clip a juego en 1959.En 1954 un par de impertinentes diseñados en forma de tigre con la garra levantada. En todos los casos, el diseño y la calidad eran exquisitas, dando a estos felinos de la jungla poder y belleza junto con un fuerte sentido del movimiento. Una colección de felinos incomparable.
Cartier diseñó un collar de pechera de oro y gemas engastadasen 1945 , de nuevo desmontando muchas de las joyas no utilizadas por la duquesa. De inspiración hindú, este collar resultaba particularmente atractivo en la pequeña figura de la duquesa.
La única joya que el duque recibió de su madre, la reina Mary, era un sencillo collar de una vuelta de veintiocho perlas. Fueron remontadas por Cartier, París, y la duquesa decidió llevarla a menudo con el gran colgante de perla y diamante que adquirió de Cartier en 1950.
Entre sus otras joyas de perlas había un atractivo par de pendientes de perlas y diamantes de Van Cleef & Arpels de 1957. Los Windsor también patrocinaron a diseñadores como Suzanne Belperron, Verdura, Seaman Schepps y David Webb. Éste último creó para ella su propia versión de las «joyas de la jungla». Éstos llegaron en forma de encantadoras ranas decoradas con esmalte y engastadas con diamantes y rubíes en cabujón.
Adquirió del Maharajah de Baroda unas pulseras de tobillo de diamantes y esmeraldas de cabujón de los que creó un collar en 1953.
En 1960 adquirió una bonita esmeralda de 48,95 quilates que había pertenecido anteriormente al rey Alfonso XIII de España, montado con diamantes en un colgante.
El diamante «McLean» fue probablemente la estrella en la colección de los Windsor. Era una piedra en forma de almohadilla de 31,26 quilates y del mejor color. De las antiguas minas hindúes de Golconda. Había pertenecido anteriormente a Evelyn Walsh McLean, la afamada anfitriona de Washington y ávida coleccionista de joyas. Poseyó el fabuloso diamante azul conocido como «Star of the South». Tal era su amor por la joyería que en su autobiografía escribió «cuando me niego a llevar joyas, los astutos miembros de mi familia llaman al médico porque creen que estoy enferma».
La venta de las joyas de los Windsor alcanzó un precio en subasta de 31MM de dólares. El subastador, Nicholas Rayner, dijo en el momento de la venta, «Los tres factores de historia, calidad y diseño están presentes y hacen esta colección única». Es alentador e increíble que estos hechos alcanzaron tales resultados, que posibilitaron que el Instituto Pasteur llevara a cabo avances médicos vitales en la investigación del cáncer y del SIDA.
Esperamos que os hayan gustado Las Joyas de la Wallis Simpson. Y que nos contéis cuál es vuestra favorita.
Como ya os hemos ido mostrando en nuestro Instagram, hemos sacado una nueva colección de joyas Art Decó. Entre ellas hay muchos pendientes, pero también sortijas y colgantes.
El Art Decó
Tenemos un post muy completo dedicado a la joyería Art Decó, donde os contamos cómo y cuándo nace este estilo. No solo en joyería sino que también en la moda, los automóviles… Además, os contamos algunas curiosidades de la época. Si quieres leerlo, te dejamos el link directo aquí.
Para ponernos un poco en contexto os contaremos un pequeño resumen.
El nombre “Art Decó” se toma de la exposición internacional de Artes Decorativas celebrada en París en 1925. La finalidad de esta exposición era la de mostrar los adelantos industriales y decorativos más importantes del momento.
El movimiento Art Decó nació y triunfó en los años 20. Su pico de popularidad se encontró entre 1920 y 1939, aunque su influencia sigue muy viva en nuestros días. Se caracterizó fundamentalmente por una tendencia estética hacia las líneas rectas: la simetría de los objetos. El objetivo principal era el de adaptar el diseño a las condiciones de producción en serie exigidas por las industrias modernas de la época.
El término hizo fortuna. Se aplicó a diversas variantes, tales como la arquitectura, el mobiliario, la joyería, la moda, la automoción y un largo etcétera.
Nuestra colección de joyas.
Toda nuestra colección de joyas Art Decó esta realizada a mano por maestros orfebres, que trabajan los materiales y las piezas como se hacía en aquella época. Con esto conseguimos que las piezas sean únicas y diferentes.
Todas ellas están realizadas en plata 925 y piedras semipreciosas como el jade verde, el ónix o las marquesitas – o marcasitas -. Y todas las perlas que utilizamos son perlas de agua dulce. La marquesita es un mineral muy frágil compuesto básicamente de sulfuro de hierro. Estas piedras son de color gris oscuroy una vez se pulen tienen ese brillo metálico que las caracteriza. Son piedras delicadas y frágiles.
Os dejamos las fotos y los links a nuestra web de una parte de la colección. Si no os queréis perder nada, os recomendamos seguirnos en Facebook o Instagram, donde os contamos siempre todas las novedades de nuestra tienda.
Es muy curiosa la historia detrás de la boda de John Lennon y Yoko Ono. La boda que celebraron finalmente no tiene nada que ver con la que ellos tenían pensado. Pero varios problemas de última hora hicieron que su boda, en lugar de tener lugar en París, fuera en Gibraltar.
John Lennon y Yoko Ono.
Creo que todos conocemos muy bien a esta famosa pareja, pero vamos a ponernos en contexto. John Lennon fue un cantante, compositor, músico y activista por la paz, que alcanzó fama mundial como fundador, co-vocalista principal y guitarrista rítmico de los Beatles.
Por otro lado, Yoko Ono, de origen japonés, es un artista, cantante, compositora y activista por la paz. Su trabajo también abarca el arte escénico, que realiza tanto en inglés como en japonés, así como la realización de películas.
La pareja se conoció en noviembre de 1966 cuando ella se preparaba para inaugurar una exhibición de arte llamada Unfinished Paintings and Objects. Que se llevó a cabo en la Indica Gallery, ubicada en el sótano de la Indica Bookshop en Londres.
La ceremonia de bodas.
John Lennon estaba casado con su primera mujer Cynthia, cuando conoció a Yoko Ono. Además, tenían un hijo en común: Julian. Pero esto no impidió que ambos tuvieran una relación. Cynthia, que sabía de la relación de su marido con otra mujer, decidió pedirle el divorcio en 1968. Es en este momento que John y Yoko empiezan a organizar su boda.
Según contó John Lennon en el documental Anthology de los Beatles, los planes iniciales de boda eran casarse en un ferry de camino a París. La pareja se trasladó a Southampton pero no pudieron subirse al barco porque Yoko Ono no era inglesa. Por lo que no tenía la visa para poder cruzar. Les comunicaron además, que no podrían casarse en ese ferry puesto que el capitán no lo permitía.
Es entonces que la pareja, tras intentar casarse en Alemania y París sin éxito -por temas de visados- decide hacerlo en Gibraltar. Según explicó Lennon eligió Gibraltar porque es tranquilo y amistoso. Además, allí no tendrían ningún problema para casarse puesto que él era britanico.
20 de marzo de 1969.
Este fue el día que la pareja eligió para contraer matrimonio. La ceremonia fue en el consulado de Gibraltar, a primera hora de la mañana. Fue una ceremonia corta, que apenas duró 10 minutos.
Ambos iban vestidos de blanco y con gafas de sol. John las llevaba redondas, Yoko lució unas gafas grandes que ocupaban casi todo su rostro. También lució un sombrero blanco de ala ancha, un vestido corto con calzas hasta las rodillas y unas zapatillas Superga. Un look de novia totalmente desenfadado y moderno.
No llevaban ni 3 días en Gibraltar cuando la pareja se montó en su jet privado y volaron juntos de nuevo a París, donde se alojaron en el hotel Plaza Athénée.
Su curiosa luna de miel.
Como ya hemos mencionado antes, Lennon y Ono eran activistas por la paz. Así que decidieron que si iban a hacer algo tan importante como casarse, lo dedicaría a la paz. Es por esto, que la pareja organizó un estridente “Bed-In” (algo así como quedarse en la cama) dedicado a la paz. Fue durante la semana del 25 al 31 de marzo en el Hotel Amsterdam Hilton. Estuvieron rodeados por la prensa y varias personas que se unieron.
La pareja estuvo casada hasta el día en el que John Lennon fue trágicamente asesinado.
Hoy, en nuestro diccionario vintage queremos hablaros de la plata. Como muchos ya sabéis, todas nuestras piezas -a excepción de una pequeñísima colección de joyas en latón- están realizadas en plata. Por eso hemos decidido contaros un poco más sobre este metal que tanto nos gusta utilizar en nuestras joyas. Y os hablaremos de nuestra colección de tiara de plata y peinetas de plata.
La Plata.
El nombre plata proviene del latin y significa lámina de metal. La plata es un metal brillante, sonoro y maleable. La plata, curiosamente, es más dura que el oro. Y es por este motivo que se ha utilizado para acuñar monedas en todas las épocas de la historia. La plata, se encuentra abundantemente repartida en la naturaleza. Podemos encontrarla tanto en estado puro como formando minerales.
Curiosidades.
¿Sabías que la plata es el mejor conductor del calor y la electricidad? Para fundir la plata se necesitan 960,5 grados Celsius y se forma el conocido “galleo de la plata”. Esto es, la propiedad que tiene la plata de absorber oxígeno cuando está fundida (hasta 22 veces su volumen) que cuando se enfria vuelve a desprender.
La plata en joyería.
Normalmente, sobre todo en la fabricación de monedas, la plata era aleada con pequeñas cantidades de cobre. Así la dotaban de mayor dureza y resistencia al desgaste. A día de hoy, la plata no es utilizada en las monedas. Pero si en joyería.
Podemos distinguir dos tipos de plata segun su composicion:
Plata de ley 950: La plata de ley 950 es aquella plata que contiene un 95% de plata y tan solo un 5% de otro metal. Normalmente cobre. Es un poco menos resistente que la plata 925 ya que contiene menos cobre.
Plata esterlina o plata de ley 925: La plata esterlina es aquella plata que contiene un 92,5% de plata y un 7,5% de otro metal. Este metal generalmente es cobre. El nombre “esterlina” (sterling) deriva posiblemente de los Easterling, que fueron comerciantes en el siglo XII conocidos por la perfecta acuñación de su moneda.
Plata pura: Este tipo de plata no está mezclada con ningún otro metal. Por lo que es la plata más pura que existe. Pero esta plata, al no estar mezclada con ningún otro metal es muy poco resistente, por lo que no suele utilizarse en joyería.
Tiara de plata. Vintage by Lopez-Linares.
Nuestras joyas están realizadas en plata esterlina, o plata 925. Es una plata de mucha calidad que es bastante resistente, algo muy necesario sobre todo para nuestras tiaras y peinetas.
En el caso de las tiaras y las peinetas, necesitamos que el material, en este caso la plata, sea resistente pero a su vez maleable. Sobre todo en las tiaras ya que queremos que se adapten perfectamente a la forma de nuestra cabeza. Al realizar las tiaras de plata -y las peinetas y pendientes- conseguimos una pieza de alta calidad, con un brillo excepcional. Y sobre todo, una pieza duradera. Nuestros pendientes, tiaras y peinetas son piezas que te durarán toda la vida.
Si quieres leer nuestro post dedicado a las tiaras puedes hacerlo aquí.
Juliette Récamier nació en diciembre de 1777 en Lyon, Francia. Fue la única hija del matrimonio entre Jean Bernard, notario y consejero del rey, y Julie Matton. Julie, cariñosamente llamada Juliette, es aún hoy conocida por ser un icono de la moda y del neoclasicismo.
Su controvertido matrimonio.
En 1793, a la edad de 15 años, Juliette contrajo matrimonio con Jacques-Rose Récamier. Jacques era un reputado banquero casi treinta años mayor que Juliette. El matrimonio alquiló el Castillo de Clichy y los parques y jardines anexos. Años después, compraron un maravilloso palacete en la rue Moint Blanc, también en París.
Me ha parecido muy curioso un rumor que circuló en aquella época sobre el matrimonio entre Juliette y Jacques. Muchos biógrafos han dado este rumor como cierto, aunque realmente no está probado como tal. Y de hecho, existen historiadores que descartan esta teoría:
Se dice que Jacques -su marido- era en realidad el padre biológico de Juliette. Que se casó con ella para así, hacerla su heredera. Estamos hablando de la época del terror revolucionario, donde muy fácilmente podías acabar en la guillotina. Pero si eso le pasaba a Jacques, sería Juliette quien heredara su dinero. Además, se dice que su matrimonio nunca fue consumado.
Su salón en Paris
El salón de Juliette fue, durante muchos años, uno de los principales salones de los miembros literarios y políticos de la sociedad parisina. En estos eventos, se reunían personas de intereses afines y debatían sobre temas como la literatura, el arte o la política.
Fue en 1796 cuando se empieza a conocer a Juliette como “La Reina de Paris”. Comenzó a tener amistades importantes, como por ejemplo Madame de Staël, a cuyo padre, curiosamente es a quien ella y Jacques compraron el palacete en la rue Moint Blanc. Otras personalidades conocidas acudían a su salón de forma regular, entre ellos el General Jean Bernadotte y el General Jean Victor Moureau.
El exilio de Juliette Récamier.
En 1803, Napoleon ordenó el exilio de su gran amiga Madame de Staël. Juliette no estaba nada conforme con esa decisión y confrontó a Napoleon. Además, se negó a actuar como dama de honor de la emperatriz consorte Joséphine de Beauharnais. Para más inri, muchas de las personas que visitaban su salón eran ex monárquicos descontentos con el gobierno de Napoleón. Todas estas situaciones llevaron a Napoleon a ordenar el exilio de Juliette. Después de una corta estancia en su Lyon natal, se dirigió a Suiza, a Roma y finalmente a Nápoles.
Coincidiendo con su exilio, su marido tuvo una mala racha en los negocios que le llevó a tener unas pérdidas financieras enormes. Fue en su estancia en Suiza, visitando a su amiga Madame de Staël que conoció al príncipe Augusto de Prusia. Ambos se enamoraron, y Juliette pensó en divorciarse de Jacques para casarse con Augusto. Algo que finalmente no hizo. Julie consideró que su marido siempre la había tratado muy bien, que estaba mayor y arruinado -en parte, a consecuencia de su exilio- y decidió quedarse con él.
Su nuevo salón en París.
Cuando su amiga Madame de Staël enferma, Juliette va a visitarla muy a menudo. Es en una de estas visitas que ella se reencuentra con François-René de Chateaubriand, conocido por ser el fundador del Romanticismo en la literatura francesa. Ambos se enamoran y comienzan una relación en 1819. Fue cuando se instaló en Abbaye-aux-Bois que su pequeño salón volvió a convertirse en el centro literario de París.
Los ultimos años de Juliette Récamier.
Jacques-Rose murió en marzo de 1830 en París. Años antes, debido a la extrema presión de su familia, Chateaubriand se había casado con una joven aristocrática que murió en 1847. Con Juliette viuda y la esposa de Chateaubriand fallecida, Chateaubriand, que apenas podía caminar, sugirió que él y Juliette se casaran. En ese momento, Juliette se estaba quedando ciega y, aunque consideró temporalmente casarse con él, finalmente no lo hizo. Aunque durante sus últimos años Chateaubriand visitó a Juliette en Abbaye-aux-Bois con frecuencia.
En 1849, Récamier murió en París de cólera a la edad de 71 años. Fue enterrada en el Cimetière de Montmartre en Montmartre, París.