Hace unos días Natalia Gómez del Pozuelo colgó un tweet muy peculiar, pedía a los twitteros que la ayudáramos contándole anécdotas curiosas sobre nuestra experiencia en Twitter. Su idea es utilizar esas  anécdotas en  su próximo proyecto, un libro sobre Twitter.

Dudé unos minutos si enviarla un mail con mi experiencia: la historia de cómo una anticuaria pasó de desarrollar su actividad en un entorno del S.XVIII, a entrar de lleno en el  S.XXI, casi sin darse cuenta.

No sé si mi historia responderá a sus expectativas, pero sentarme delante del ordenador a escribir un resumen de mi año en Twitter, me permitió reflexionar en todo lo que había cambiado mi vida desde que entré a formar parte de esta curiosa red social.

Le hablé de mi experiencia a nivel personal y, lo más sorprendente, del apoyo incondicional que había recibido de tantas personas anónimas, gente que sin conocerme de nada había colaborado desde el principio en mi proyecto, y que habían entrado a formar parte de mi vida de una forma tan curiosa como la propia red social.

Soy de la opinión que en las redes sociales es muy difícil ocultar tu verdadera personalidad. En seguida conoces a las personas aunque no las hayas visto nunca. La personalidad de cada uno se refleja en cada uno de nuestros tweets.

Una de estas personas es Karen. Ella apareció en mi TL cuando apenas la cuenta tenía unos meses, consiguiendo sorprenderme desde el principio. Karen sorprende por una generosidad fuera de lo normal y un entusiasmo por todo contagioso. Sus ilustraciones comenzaron a llenar mi TL y el de muchas otras personas. Ahora, por las mañanas, lo primero que recibo es un mensaje suyo con un video de Youtube, es un buenos días muy especial y sé que no soy la única que está esperando su enlace. Un video que nos da animo desde primera hora de la mañana y nos invita a comenzar el día con ilusión. Karen comparte simplemente por el amor de compartir, sin esperar nada a cambio.

Y luego, cuando  llega  la noche, ella nunca  falla… todos los días nos sorprende con una de sus preciosas y sugerentes ilustraciones.

Este es mi pequeño homenaje, la única manera que tenía de agradecerle, en mi nombre y en el de todos los que la siguen, el cariño con el que cada día nos menciona, nos retwitea y nos dedica sus preciosas dibujos.

Podéis seguir a Karen en Twitter: @Baroneti no os defraudará.

¡¡Muchas gracias  por todo Karen!!