Hoy queremos hablaros de un icono, una mujer que llegó a ser de las más deseadas y admiradas de la gran pantalla en el Hollywood de los años dorados. Se trata de la espectacular Rita Hayworth. Hoy queremos centrarnos en contaros un poco sobre sus cinco bodas, aunque también hablaremos un poco sobre quién fue ella.
Rita Hayworth
Rita Hayworth, nacida con el nombre de Margarita Carmen Cansino fue una de las actrices más emblemáticas y glamurosas de la época dorada del cine estadounidense. Así como la diva máxima de Hollywood de la década de 1940. Ocupa el puesto 19º en la lista del American Film Institute de las grandes estrellas del Séptimo Arte. Fue apodada «la diosa del amor» por la prensa rosa de su tiempo debido a su extraordinaria belleza y la enorme atracción que ejercía sobre el público masculino. Gilda, su mítico personaje, es considerado hasta la actualidad como el prototipo de la belleza femenina.
Nació en Nueva York, en 1918 y fue hija del bailarín español Eduardo Cansino Reina, natural de la localidad sevillana de Paradas, y Volga Margaret Hayworth, una bailarina estadounidense de los Ziegfeld Follies.
Las 5 bodas de Rita Hayworth
Debajo de esa personalidad de mujer fatal se escondía una persona sencilla, tímida e insegura, que lo único que buscaba en la vida era ser querida. Por ello, lo intentó en cinco ocasiones, pero siempre escogió al hombre equivocado.
Primer matrimonio
Su primer matrimonio fue en 1937, cuando tenía tan solo 18 años. Sus padres se opusieron a este matrimonio ya que, su marido Edward Judson casi le triplicaba la edad. Sus padres no consiguieron evitar el matrimonio y, además,Edward se convirtió no solo en su marido, sino también en su manager. Judson era un hombre frío, astuto y calculador y la manipulo a su antojo.
La boda se celebró con una sencilla ceremonia civil en Las Vegas. Rita llevó en su primera boda un sencillo traje de chaqueta de tarde, muy juvenil, que remataba con un gran lazo del mismo tono en la cabeza.
Para Edward Judson Rita era un diamante en bruto al que había que pulir, exhibir y explotar. Por ello la vestía, cambiaba de imagen, e incluso la hizo visitar clubes nocturnos… hasta que, por fin, consigue un suculento contrato de siete años de duración con Columbia Pictures. Rita en ese momento era una cría sin gran carácter, con poca cultura, que se dejó manipular pero con el tiempo se dio cuenta que lo único que le interesaba a su marido de ella era el dinero. El matrimonio acabó en divorcio, al término del cual, Rita se encontró literalmente en la calle sin un dólar en su cuenta bancaria. Todo lo que había ganado se lo había confiscado su marido. Decepcionada declararía: “Me casé con él por amor, pero él se casó conmigo para hacer una inversión.”
Segundo matrimonio
El segundo matrimonio fue con el actor, director y productor de cine Orson Welles. Un día de 1941, Orson Welles, durante una reunión de amigos, arranca la foto de Rita de la portada de la revista Life y dice: “ésta será mi próxima mujer.” Un íntimo le dice : “estás loco, por más famoso que te creas, ella, seguramente, ni sabe de tu existencia”. Por entonces Rita rodaba una película en Brasil y llega a sus oídos que Orson Welles, al que ni siquiera conoce, anda diciendo que se iba a casar con ella. Rita creyó que querían gastarle una broma porque Welles era un genio, un intelectual y ella se consideraba fuera de su nivel. Para ella, Orson era un sueño inalcanzable.
Pero Orson consiguió lo que quería y en septiembre de 1943 se casaron en una discreta ceremonia. Para esta ocasión Rita escogió otro traje de chaqueta, esta vez más formal que el de su primer matrimonio. Y, sobre su cabeza, lució una bonita pamela del mismo color del traje con un tul que le cubría el rostro.
Los primeros meses de matrimonio fueron felices; a Orson le fascinaba la vulnerabilidad y fragilidad de Rita, que no tenía nada que ver con la imagen de mujer fatal que refleja en la gran pantalla. Rita consiguió hacerse un sitio en el mundo de las amistades de Orson. Se sentía bien junto a ellos, y cuando hablaban de temas profundos callaba e intentaba aprender lo máximo posible. El abismo intelectual entre los dos era grande y esto provocaba en ella falta de confianza en sí misma. Con la llegada de Rebeca, su primera hija, Rita creyó que esto uniría aún más su matrimonio, pero fue todo lo contrario. Orson, comenzó a vivir su vida profesional, social y política alejado de Rita y la niña, no quería ninguna atadura. Pronto vinieron las infidelidades de su marido, lo que que les llevó a la separación. Aunque sí hubo intentos de reconciliación, al final se acabaron divorciando.
Tercer matrimonio
En el caso de Rita, a la tercera no fue la vencida. Tras su segundo divorcio, se encontraba bastante hundida y con una gran depresión. Por lo que decide marcharse a Europa.
Allí, en la Riviera, conoce en una fiesta al príncipe Aly Khan, hijo del Aga Khan III, y famoso playboy. El príncipe que había quedado prendado de ella desde que la vió actuar en “Gilda”, nada más verla en la fiesta, la cortejó y la sedujo. Rita creyó ver en él el amor que necesitaba. Así que en mayo de 1949 se casaron en el pueblecito francés de Vallauris, en plena Costa Azul.
Rita estaba elegantísima, con un bonito traje midi de novia, de corte clásico con falda plisada. Estaba confeccionado en muselina azul celeste, una gran pamela a juego y un pequeño ramo de azahar en sus manos. La celebración se hizo en el hotel L’Horizon y fue sin duda todo un acontecimiento. Aly hizo construir una alfombra para que pisara por ella Rita, perfumó la piscina con 450 litros de agua de colonia y, sobre el agua, pusieron sus iniciales con flores frescas. Todo fue como un cuento de hadas.
A los pocos meses del enlace, Rita dio a luz a su segunda hija, Jasmine. El cuento de hadas acabó y un buen día el príncipe decidió que ya estaba bien de placidez familiar y que había llegado el momento de volver a su antigua vida social. Por lo que se instaló de nuevo en su mansión de la costa azul, dejando a Rita al margen. De nuevo se encontró sola, esta vez en un país extraño al cual seguía con gran esfuerzo acomodando. Estaba rodeada de lujo, llena de joyas, pero de nuevo sola y humillada por las infidelidades de Aly. En 1953 se divorciaron y con sus dos hijas regresó a los Estados Unidos.
Cuarto matrimonio
Su cuarto enlace matrimonial fue con el cantante argentino Dick Haymes. Se encontraron por primera vez cuando este aún estaba casado y su carrera de cantante estaba en declive. Haymes tenía graves problemas económicos, ya que sus dos ex esposas estaban tomando acciones legales en su contra. Y por ello tenía muchas deudas. Rita acabó pagando la mayor parte de ellas. Al problema económico se unió el peligro de ser deportado a Argentina por ser un extranjero ilegal. Ella se hizo cargo de su ciudadanía casándose con él en septiembre de 1953.
Lo hicieron en el Sands Hotel de las Vegas, en presencia de las dos hijas de Rita. La novia estaba radiante, esta vez llevaba un elegante vestido escotado de cuello de barco, guantes largos y un elegante tocado con velo que le cubría la cara. Haymes nunca llegó a salir a flote en su carrera, más bien vivía de los ingresos de Rita. Las infidelidades de Dick eran públicas y notorias, era un déspota con Rita, llegando en una ocasión a golpearla en la cara públicamente en un club nocturno de los Ángeles. Esa fue la gota que colmó el vaso, Rita hizo las maletas y se fue para nunca regresar a su lado. Después de este nuevo fracaso, cayó en una fuerte depresión, encontrándose nuevamente sin dinero y moralmente hundida.
Quinto, y último matrimonio de Hoy Rita Hayworth.
Buscando el amor verdadero, comienza una relación con el productor de cine James Hill. Un cuarentón, soltero aficionado a la música y al arte, una persona de vida tranquila que podría ser el remanso de paz que ella tanto buscaba. El 2 de febrero de 1958 en una privada y sencilla ceremonia contraen matrimonio en Beverly Hills, Los Ángeles. Rita que necesitaba de la paz y el sosiego de una vida hogareña quiere dejar el mundo del cine, idea a la que se opone rotundamente su marido, y la obliga a continuar con su carrera.
A los tres años de matrimonio, Rita no puede más. Su carácter se vuelve inestable y agresivo y comienza a abusar del alcohol, que era lo que le daba fuerzas para continuar en ese momento. El matrimonio se deshace, James menosprecia a su mujer en público y en privado. Rita sufre como nunca y en septiembre de 1961 pide el divorcio alegando crueldad mental extrema.
Fue el alcohol y el Alzheimer los que obligaron a Rita Hayworth a retirarse del cine… Su hija Jasmine cuidó de ella y fue de su hija de quien recibió el calor y el cariño que toda su vida estuvo buscando.